DESAMPARO, CREACIÓN Y OMISIÓN
1) El día Jueves 27 de Octubre de 2022, alrededor de las 20:00 hs Beatriz (82) se encontraba sentada en
el pilar de la ventana que está sobre de la vereda de su casa, domiciliada en calle J. M. Gutiérrez N°
1240. Estaba conversando con alguien, en ese momento llega al lugar su hijo Marcelo e irrumpe la
conversación quedando ambos en el lugar, al cual le manifiesta reiteradas veces que estaba
descompuesta y “desvanecida”, haciendo énfasis en su desvanecimiento. Este, su hijo, le pregunta que
si estaba desvanecida como podía hacer para estar hablándole. Beatriz (82) continuó diciendo que
estaba desvanecida. Marcelo, su hijo, ofuscado por no comprender la situación o la expresión se retira
del lugar inmediatamente.
Horas más tarde, alrededor de las 00:00 HS, llega a la casa de Beatriz (82) el Delivery con el pedido de
helado que ella había encargado. Al momento del pago del mismo aduce al empleado de la heladería
que se estaba desvaneciendo y estaba muy descompuesta. Motivo suficiente. El empleado al volver a
la heladería comento la situación ahí en su trabajo y decidieron enseguida enviaron a su casa a los
servicios de emergencia.
Fue trasladada al hospital, el problema había sido la presión arterial alta debido al olvido de tomar la
medicación para la hipertensión diagnosticada oportunamente.
2) El día siguiente, Viernes 28, yo me anoticio de todo lo antes mencionado mediante un mensaje de
texto de su hijo Mario. De inmediato acudo a la casa de mi abuela, donde estaba Liliana, su nuera, la
esposa de Mario y su hijo Marcelo. Escucho el relato de lo acontecido y le propongo a mi abuela un
programa de base médica terapéutica nutricional y de acompañamiento nocturno controlado y
responsable para mejorar su salud física y mental o mantenerla estable. Este era el programa
C.U.I.D.A.R. (CUIDADO UNICO INTEGRAL DE ABUELOS RESIDENTES), proponía para ese entonces un
plan nutricional para adultos mayores con suplementos dietoterápicos, evaluación psiquiátrica y una
persona que la acompañe solo en las noches ya que serían las hora más vulnerables donde nadie
podría auxiliarla sino apareciera azarosamente un delivery. Estuvo totalmente de acuerdo en estas
opciones. Como alternativa a estas opciones en caso de rechazo, se evaluó el hospedaje en algún
Hogar para Abuelos. Esta ultima la rechazó rotundamente, comprendiendo la importancia de la
nutrición, estabilidad y de una persona que la acompañe en horas de la noche y que además pueda
llevar control de administración de medicamentos.
Presentes su hijo Marcelo y su nuera Liliana escucharon atentamente nuestro dialogo, programa y
propuesta, los dos también de acuerdo. Después de esa charla fui personalmente a comentarle el
programa a su hijo Mario quien también estubo de acuerdo.
Se creó un grupo para comunicaciones de C.U.I.D.A.R, participando en este Mario, Marcelo y Agustín.
Se solicitó turno con Med. Nutricionista, se otorgó de PAMI suplementos alimenticios dietoterápicos.
Se solicitó turno con Med. Psiquíatra Sandra Lucero. Se propuso 3 postulantes calificados para
acompañamiento.
3) En principio, destaco la participación de su hijo Mario para la gestión de turnos en Med. Nutricionista y
gestiones de PAMI pese a que hubo que insistirle y recordarle reiteradas veces. Logró que podamos
comenzar la etapa de la ingesta suplementaria pronto.
En cuanto al turno con profesional médico Psiquiatra fue solicitado el 31 de Octubre y otorgado para el
día 15 de Noviembre. Si bien estábamos de acuerdo en que la Abuela asista a una consulta para
obtener un informe, en estos 15 días había cada uno puso de manifiesto su opinión sobre como debía
actuar el profesional, por ejemplo Mario sugería que se le diga a la Dra. Que le indique la misma
medicación que le recetaron a su tía, que le estaba haciendo muy bien y por otro lado Marcelo
cuestionando que tan profesional es, si en la primera consulta es viable que se indique alguna
medicación, con una marcada disidencia. La noche anterior a la fecha del turno Mario llama a su madre
alrededor de las 22:30 HS y le dice que se prepare por la mañana que tiene que ir a la consulta con la
Psiquiatra, ella le responde que no es ninguna loca y que no va a ir a ninguna consulta. Esa misma
noche, la abuela logra comunicarse con la Dra. Y cancela el turno. Ya por la mañana, aún sin
anoticiarnos de la cancelación del turno, mientras coordinábamos actividades se seguía cuestionando
si la psiquiatría era una ciencia médica. Alrededor de las 9:50 me llama por teléfono la Abuela para y
me comenta lo anterior mencionado, que no va a ninguna psiquíatra y que ya está bien, que sabe que
se comprometió con lo del programa pero que no va a ir porque ella está bien.
De los postulantes para acompañamiento para el día 4 de Noviembre estaban propuestos. Nunca
tenían tiempo para hablar. Hice una reunión por video llamada donde nadie prestaba atención y
hablaban cualquier cosa menos lo puntual. Les pedí una reunión personal, Mario propuso de
encontrarnos en su casa el Domingo 6. Fui, Marcelo no asistió, después de esperar 2 horas que termine
de regar las plantas insisto con lo que había que tratar y me responde que estuvo pensando que por
ahí seria bueno buscar una persona que vaya a la tarde, que haga de comer le ayude en las actividades
diarios y demás, justo le suena el teléfono y se termina la reunión. Entendí que no entendió nada. Salí
del grupo. Terminó C.U.I.D.A.R.-